Pues bueno, ya doy por
finalizada esta temporada (aunque aún me queda el Campeonato de Andalucía
absoluto, que es dentro de dos semanitas).
En primer lugar, tengo que
reconocer que ha sido una de las mejores temporadas. Este año, mis
entrenamientos han dado sus frutos, por lo que quedo satisfecha con los
resultados obtenidos. Todo se debe a mi esfuerzo y constancia. A ver, no quiere
decir que haya sido la única temporada en la que me haya esforzado, “para
nada”, sino que en ella me he dado cuenta del nivel en el que me encuentro. Básicamente
lo que he hecho ha sido dar un pasito más.
Mis exigencias por seguir
compitiendo llegaron tras obtener el tercer puesto español en 3000m. en pista
cubierta ¡Fue una pasada! En la vida me habría imaginado llegar a estar subida
en un podio español. Allí, en San Sebastián, me demostré a mí misma lo alto que
podía llegar a estar y, además, me propuse entrenar más seriamente y centrarme
en las mínimas para los siguientes campeonatos.
Podio Campeonato de España 3000m en pista cubierta.- San Sebastián
Así, semanas más tarde,
conseguí de nuevo un tercer puesto español en Huelva, pero esta vez en 5000m.
Hasta ahora no os lo había
comentado, pero ya podéis deducir vosotros mismos que soy fondista. “¿Por qué
fondo?”, os preguntareis. Pues ya os contaré en mi siguiente escrito, así que
os haré esperar. Entonces os conetaré alguna que otra anécdota, así que no os
la perdáis.
Eso sí, antes de irme, me
gustaría añadir que ha sido una temporada llena de emociones, risas, algún que
otro llanto… pero, sobre todo, ha sido una temporada repleta de buenas personas
que me han dado un apoyo constante y muchísimas fuerzas para alcanzar mis
metas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario